La hermana M. Christine nació el 10.04.1946 en Obergreuth/Landkreis Bamberg como primera hija de tres hermanos y fue bautizada con el nombre de María. A los 21 años siguió su deseo interior silencioso y largamente acariciado: pidió ser aceptada en las Hermanas Franciscanas de Bamberga. A través de su tía, nuestra Hna. Godeberta, conoció a las Hermanas Franciscanas; los valores franciscanos la atrajeron.
El 29 de septiembre de 1969, María tomó el hábito y recibió el nombre de Hna. M. Christine. Completó su formación como asistente médico-técnica en Colonia-Hohenlind. Tras su graduación en 1973, la Hna. Christine se hizo cargo del departamento de rayos X del Waldkrankenhaus Sta. María de Erlangen como jefa de MTA y lo dirigió durante 15 años. La Hna. Christine estaba comprometida en todo: convencía por sus conocimientos profesionales y su cordialidad, acompañaba a los colaboradores y sobre todo a los pacientes, animaba el convento con sus ideas poco convencionales, iniciaba los estudios bíblicos vespertinos y sabía sacar a relucir hábilmente los puntos de crítica en el momento y el lugar adecuados.
En el Capítulo General de 1988, la Hna. Christine fue elegida Asistenta General y, poco después, nombrada Superiora del Convento de la Casa Madre. Fue una gran adaptación para ella.
Que la Hna. Christine fuera elegida Superiora General en el Capítulo General del año 2000 fue probablemente la mayor sorpresa para ella. Confiando plenamente en el poder y la gracia de Dios y en el apoyo de sus hermanas, aceptó el cargo. La hermana Christine creció con sus tareas. Rápidamente, de forma poco convencional, eficaz y valiente, dirigió su atención a los proyectos en espera y a los ya iniciados, y sobre todo a las personas. La reelección en 2006 fue la consecuencia lógica. Lo que la Hna. Christine inició, acompañó, cargó y dio forma durante sus doce años de mandato es inmenso: Además de la tarea principal de proporcionar una buena vida espiritual a las Hermanas, hubo proyectos de construcción, trabajo sobre la declaración de la misión, cambios en la forma jurídica, actividades del consejo de supervisión, gestión de la calidad, aperturas y cierres de conventos, nuevas fundaciones en la India y en Croacia con el establecimiento de instituciones congregacionales y formación religiosa en la India, el comienzo de la revisión de nuestras Constituciones y mucho más.
A pesar de que la Hna. Christine, con su modesta y reservada manera, no pretendía en absoluto un efecto externo, ni siquiera lo esperaba, pronto fue invitada a formar parte de organismos públicos: en el consejo ampliado del Consejo Misionero Católico Alemán (DKMR), y a la recién creada Comisión de Mujeres de la archidiócesis de Bamberg. A nivel suprarregional, sus logros fueron honrados en 2008 con la Medalla de Honor de Plata del Distrito de la Alta Franconia, en 2011 con la Medalla de San Bonifacio por el Arzobispo Ludwig Schick y en 2014 con la Orden del Mérito de Baviera por el Ministro del Interior Horst Seehofer.
En todo, la Hna. Christine se conservaba un corazón para todas las cosas creadas, cuidaba las plantas y estaba fascinada tanto por el macrocosmos como por el microcosmos. "Permitir la vida - fomentar la vida - proteger la vida", esta actitud básica recorre todas sus actividades. Junto con una esperanza inquebrantable y una fe firme, persiguió sus objetivos con constancia y sorprendió una y otra vez con valientes innovaciones. Al mismo tiempo, se mantuvo abierta a los necesitados y sensible a las necesidades de la gente, y fue totalmente desinteresada en su servicio a todos los demás.
Después de su retiro intencional como Líder Congregacional, ayudó durante seis meses en la India y 2013 encontró un nuevo lugar en el Marienhospital en Erlangen. Pero al cabo de unas semanas sufrió un derrame cerebral. Con una energía tenaz, luchó por volver a la vida, volvió a tener movilidad y pudo realizar sus tareas a menor escala.
En junio de 2017, la Hna. Christine se unió a nuestra unidad de enfermería en la Casa Madre en Vierzehnheiligen. Hasta enero de 2021, la Hna. Christine se desplazaba en silla de ruedas. Participó en la vida comunitaria y se mantuvo interesada en todo lo que ocurría en la comunidad, la iglesia y el mundo. Disfrutaba de las visitas y mantenía contactos en su país y en el extranjero por carta y teléfono. Sufría mucho por el deterioro de la vista y porque a pesar de que su mente estaba muy despierta, su voluntad intacta, ... su cuerpo se debilitaba y su movilidad disminuía cada vez más.
Desde febrero de 2021, tras un nuevo deterioro de la salud, la Hna. Christine no se recuperó. Se dio cuenta de su 75 cumpleaños, le leyeron todas las cartas y expresó su alegría con sus expresiones faciales. Poco a poco, pero con firmeza, su espíritu y su alma se despidieron de esta tierra, de toda pesadez, de todo sufrimiento. La mañana del 17 de abril justo en el momento en que sonaba un himno de Pascua en la capilla y su hermana Claudia estaba también con ella, se convirtió para la Hna. Christine en el comienzo de una mañana de Pascua que ya no conoce más atardecer.
R.I.P.
El 21 de abril de 2021 se celebraron el funeral y el réquiem en Vierzehnheiligen.
En persona, por escrito y también a través de las donaciones recibidas, la gente expresa su dolor, su gratitud y su simpatía. Agradecemos a todos los que nos han dado una muestra de su estima por nuestra hermana Christine.
En su espíritu estamos recogiendo donaciones para nuestros proyectos en Perú, India y Croacia.
Relato de las Hermanas Franciscanas
IBAN: DE 87 7509 0300 0009 0085 00
Liga Bamberg
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